Hasta siempre, Gabo

Hoy mi universo interior se llena de nostalgia, hoy nos deja Gabo, Gabito, el hombre que en su vida mediante cada una de sus letras logró plasmar casi que a la perfección tantos aspectos de nuestra cultura Latina, logró mostrar al mundo lo que debía saber sobre nuestro continente y sobre un país que ha sufrido tanto como Colombia; ese mismo país que ha sido testigo de sus triunfos, del ejemplo de lucha y esperanza, el ejemplo de un hombre que tanto como escritor y periodista, dejó fragmentos de su vida imprimiendo en letras numerosos pensamientos, sentimientos, y sueños lo que la vida nos puede ofrecer en letras.


Difícilmente podré olvidar aquella obra maestra como lo fue Cien años de Soledad, sin duda, la obra Latinoamericana más importante de la historia, y una de las mejores en el mundo, una obra que cambió el rumbo de la Literatura, aquella novela que nos hizo soñar al pasar cada página, esa que nos remontaba a imaginarnos aquel mítico Macondo, ese pueblo tan bien descrito por el Genio Gabriel: aquel hombre que ha tenido tanta influencia positiva en mí y en tantas personas alrededor del mundo, que nos hemos visto reflejadas en sus ideologías, que nos ha impulsado a defenderlas, que nos demostró la inmensurable capacidad intelectual del ser humano, el constructor de Sociedad.


El consuelo que nos queda es quizá su obra que es inmortal, aquel hombre que nos impulsó a soñar hoy estará dichoso al ser recordado de la única forma que merece serlo, como un precursor de un País y de una región

Adiós Gabo.